martes, 3 de noviembre de 2015

A la Pica d'estats per França.

Ganas de abrazar esa cruz, en la cima de Catalunya.
Victor me comenta que  la noche de San Juan  va a subir a la Pica d'Estats, y yo le pregunto si puedo acompañarle. Me da un SI sin dudarlo un segundo. Mi primer "tresmil". Empiezo a entrenar.
Se puede subir por Catalunya (Vallferrera) o por Francia(Pinet)
Elegimos la segunda, mas larga, mas exigente, pero con la posibilidad de dormir en el refugio Pinet y dejar lastre para la cima.







Primer día llegamos al parking de l'Artigue (1200m.) Un regalazo para la vista. Los primeros metros caminamos acompañados del rio, su rumor nos acompaña hasta entrar al bosque, también espectacular. Llevamos una hora subiendo cuando se divisa mas claridad, acaba el bosque, ahora todo lo que falta hasta Pinet es sin árboles que nos protejan del sol.

El verde está presente en todo lo que alcanza mi vista, atravesando auténticos mares de rododendros, una maravilla el espectáculo del deshielo y la flora.
Encontramos niebla, bastante habitual a esta altura, el refugio no se ve hasta que faltan unos metros. Preciosa visión con el lago enfrente.


Ya estamos a 2250m.
Patrick nos da la bienvenida compartiendo un vino y unos frutos secos.Victor habla un francés muy fluido, así que es facil entendernos.

Segundo día;
Nos levantamos a las 5:30 cogemos lo imprescindible y lo obligado según el dia. Y la verdad el tiempo no podía ser mejor. Un sol radiante ilumina el valle que tenemos que subir. Dejamos los sacos y poco mas, nos llevamos grampones a pesar del buen tiempo, la noche ha sido fria y suele helar la nieve.
Empezamos la subida y atravesamos la primera lengua de nieve, la caída a la derecha es importante, en la segunda me ayudan a pasarla y nos colocamos los grampones.
Pasamos los lagos de Montcalm y d'Estats cubiertos ambos de hielo.
Estamos a 2500 aprox. Y el sol ya ha calentado, así que los grampones los colgamos de la mochila.







Divisamos la Pica, cuando solo queda una subida, que con la ilusión de abrazar la cima se me hace corta.
Desde la cumbre vemos un mar de montañas, valles, picos, el día está muy claro.
Justo al lado el Verdaguer, en frente el Montcalm, un poco escondido el Sotllo... a lo lejos el Aneto.

Del uno al diez, es un diez sin duda alguna.
Una experiencia inolvidable.
Un orgullo haber conseguido esta cima para mi curriculum y gracias a Victor, 
un guia tan paciente y buen conductor.

Un saludo.
Paka.